Metafisica

¿Tienes los pies en la Tierra

o la Cabeza en las nubes?

 

En ocasiones es muy difícil vivir con los pies en la tierra, sentirse estable, equilibrado, afirmarse en la realidad. Estamos sumergidos en nuestra mente, saltamos del pasado al futuro y nos perdemos del presente, de este maravilloso y único instante que tenemos para disfrutar.

 

Hay personas que se quedan ancladas en el pasado, pensando constantemente en algo que no han podido superar, en algo que ya pasó como si el recuerdo les diera una solución. Por otro lado están los que desbordan toda la ansiedad en el futuro con miedo a lo que puede venir. Recuerda que donde está tu mente estás tú, nos dicen los Maestros Ascendidos; culpa o preocupación, pasado o futuro son caras de una misma moneda, sientiéndote incapaz de afrontar el presente, refugiándote en la mente, evadiendo la perfección del momento presente.

 

ePuede ser que seas muy mental, muy emocional, padecer alguna condición, pero por la razón que sea, te desconectas de tu propio cuerpo y sensaciones, acrecentando la separación con el mundo físico. Y así te sientes desorientado, desequilibrado. Literal estás en las nubes.

 

La conexión con la Tierra, con la realidad se realiza a través del Chakra Base (Raíz), afirmando así el deseo de poner los pies en la realidad física, en armonía con la Tierra para instalarnos en la realidad presente y centrarnos en la importancia de cada momento.

 

 

Ejercicio para conectarse en la tierra

 

Este ejercicio lo puedes realizar en cualquier lugar. No es necesaria ningún tipo de vestimenta ni preparación previa:

 

• Ponte de pie con la espalda recta, el cuello y los hombros relajados, los brazos un poco separados del cuerpo; los dedos también relajados con el dedo índice apuntando al suelo, rodillas relajadas, piernas abiertas y alineadas con los hombros.

• Respira profundamente. Relaja las tensiones de la mente y del cuerpo. Inhala profundo y con cada exhalación suelta hacia la tierra todo aquello que no te sirve (emociones, pensamientos, etc.).

• Ahora pon la atención a tus pies.

• Imagínate que de la planta de tus pies surgen unas raíces muy gruesas y profundas. Visualiza como crecen y se van introduciendo en la corteza terrestre, atravesando las profundidades de la Tierra hasta llegar a su poderoso núcleo, donde se arraigan con fuerza.

• Conéctate con la energía pura y poderosa de la Tierra y siente como esta energía asciende por las raíces y fluye por tus pies y a todo tu cuerpo, proporcionándote todo lo que necesites en ese momento: seguridad, equilibrio, cuidado, estabilidad, prosperidad…

• Permanece así unos minutos e integra las sensaciones que vas adquiriendo en el proceso.

• Agradece a la Tierra la energía recibida.

 

 

Haz este ejercicio cuando te sientas fuera de ti, cuando sientas que tu mente está estancada en algún momento del pasado, en alguna frustración. En pocas palabras, hazlo cuando sientas que te encuentras fuera de ti.

 

Saludos y bendiciones.

Asif Garda